Los Barcelona Dragons ya han anunciado el roster para la temporada 2022 que está a unas pocas semanas de empezar y ya pudimos conocer los cuatro jugadores «imports», es decir, los jugadores con nacionalidad estadounidense que se pueden inscribir en la ELF. Antes de todo, recordar que solamente puede haber dos jugadores «imports» en el campo, por lo que debe haber dos para el ataque y dos para la defensa.
Una aclaración que me gustaría hacer, es que según la normativa de la liga, un jugador español que haya desarrollado sus años de formación de fútbol en Estados Unidos se consideraría «import» aunque haya nacido en Albarracín. Otra aclaración que me gustaría hacer es que se considera «import» a todo aquel jugador estadounidense, canadiense, japonés y mexicano. Así pues, tras estos incisos, vamos a conocer quienes son los cuatro jugadores de Estados Unidos que deben añadir esa calidad extra a nuestro roster.
En primer lugar vamos a hablar del defensive back Shawn Wilson. En el roster que publicó la franquicia nos aparece como safety, pero si buscamos en sus años universitarios lo podemos encontrar también como cornerback. Este jugador proviene, ni más ni menos, que de la universidad de Oregon State (PAC-12), donde jugó del 2015 al 2019, siendo uno de los jugadores más destacados del equipo y un auténtico líder de la secundaria. Con unas estadísticas globales de 140 tackles, nueve de ellos para pérdida en 42 partidos jugados, sus mejores estadísticas las encontramos en su año sénior donde consiguió 58 tackles (40 de ellos «solo»).
Un gran jugador acostumbrado a jugar contra grandes equipos, en una de las conferencias del college donde más gusta el juego aéreo. Y es que en una línea con nombres como Frecha, Brugnani, Vera o Masero, el ex-jugador de los Beavers nos da una secundaria que puede meter el miedo en el cuerpo a los rivales.
El siguiente jugador es el último en llegar, el linebacker Max Nacewicz, que ya conoce el fútbol en Europa. Proveniente de Springfield College (DIII), tiene una amplia trayectoria profesional que le ha hecho conocer el fútbol desde diferentes lugares y ligas, pasando por Canadá (CFL), el football indoor (AFL) o la liga alemana (GFL) donde fue líder en sacks.
Un auténtico portento físico y gran placador que sin duda nos hará olvidar a Tavarres y nos ayudará a mejorar en esta tarea que nos quedó pendiente.
Pasemos a las posiciones de ataque, en las que nos encontramos con un ilusionante Kyle Sweet, que sin duda será la referencia ofensiva y que tiene la difícil misión de hacernos olvidar a Jean Constant. Sweet es otro jugador que proviene de una gran universidad y también de la PAC-12, en este caso de los Cougars de Washington State. En los 50 partidos que jugó para los Cougars (2015-2018) consiguió 1500 yardas por 133 recepciones y 5 touchdowns. Además es un jugador que también puede sumar en el juego de carrera o en pases «pantalla» y que ya ha realizado algunos retornos en su etapa universitaria.
En definitiva, Zach Edwards puede estar tranquilo; si buscábamos a alguien que nos pueda hacer olvidar los retornos y las recepciones de Jean, lo hemos encontrado. ¿Os imagináis el ataque que puede preparar Coach Andrew en las manos de Zach Edwards con receptores como Sweet, Flores y con Niko Lester en la posición de running back con Jiménez y Montón?
Por último, nuestro import más nuestro y menos import, un «franchise player» que lleva el espíritu del Dragón, el ex-jugador de los Pioners de L’Hospitalet y posiblemente el mejor quarterback de Europa, Zach Edwards. Lo que más me sorprende es que no haya recibido ofertas para ir a la reciente USFL o a la CFL, pero aquí lo recibiremos con los brazos abiertos y con todo el fuego y el calor (sobre todo el calor de Reus en verano) que podamos.
En la temporada de debut de la ELF consiguió 2415 yardas para 21 touchdowns, con 11 intercepciones en 10 partidos. Además logró 334 yardas y 3 touchdowns de carrera, siendo el tercer mejor pasador de la ELF y el cuarto en pases de touchdown. Movilidad, brazo, lectura, inteligencia y carisma. Este es Zach Edwards, nuestro ataque en sus manos. Y por muchos años.
Xavi Pérez
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