La octava jornada de NFL ha sido completamente impredecible. Ni los más optimistas podrían haber predicho las victorias de ciertos equipos que parecían ya desahuciados. Los héroes de esta semana los forman equipos completamente resucitados que, de parecer lo peor de la liga, han conseguido victorias inesperadísimas mostrando su mejor juego de todo el año.
Los héroes resucitados de la semana
La resurrección de Miami
Los Miami Dolphins, que llevaban toda la temporada a la deriva, completaron su mejor partido aplastando a los Atlanta Falcons por 34-10. Nadie daba un duro por estos Dolphins y esta victoria no significa que vayan a remontar la temporada, pero sí que es un atisbo de luz dentro del pozo tan oscuro en el que se encontraban.
La defensa de Miami frenó en seco a un ataque irreconocible de los Falcons con Kirk Cousins a la cabeza. Pero es que el ataque mostró la mejor versión en mucho tiempo. Tua Tagovailoa lanzó para 205 yardas y cuatro touchdowns, Jaylen Waddle rozó la centena de yardas, atrapó un touchdown y la pareja de corredores, Achane y el rookie Ollie Gordon, tuvieron también su mejor partido.
Si bien la semana pasada decíamos que Miami debía empezar a tomar decisiones drásticas, sobre todo con respecto a su quarterback y su entrenador, Mike McDaniel, esta victoria tan aplastante pone en serias dudas esa afirmación. Con esta versión de los Dolphins sí que se puede trabajar y ser competitivo, así que veremos cuál es su evolución en las próximas semana. Lo que sí aumenta esta victoria son las posibilidades de que veamos tanto a Tua como a McDaniel en Madrid el próximo 16 de noviembre, algo a lo que mucha gente apostaba en contra hasta este partido.
La vuelta a la vida del ataque de los Texans
Otra de las resurrecciones de la semana ha sido el ataque de los Houston Texans. Hasta esta jornada, la defensa de los tejanos era lo único que sostenía a un equipo completamente inoperante en el lado ofensivo. En la victoria de esta semana por 26-15 frente a los San Francisco 49ers, esa defensa volvió a brillar, sobre todo deteniendo al corredor estrella de los niners, Christian McCaffrey. Pero lo que sorprendió a todo el mundo fue el primer gran partido en ataque de la temporada de los Texans.
C.J. Stroud tuvo su mejor partido del año, lanzando para más de 300 yardas y dos touchdowns. Por fin pudo conectar consistentemente con sus receptores y, sobre todo, su línea ofensiva, por primera vez en todo el año, le dio el tiempo necesario para poder jugar con seguridad. Es cierto que la defensa de los niners cuenta con muchas bajas importantes, como la de Fred Warner y Nick Bosa, pero hay que darle su crédito a los Texans por dominar un partido en el que no eran favoritos. Si los tejanos continúan con esta versión y la línea ofensiva permite jugar al ataque, todavía tienen una temporada ilusionante por delante.
La jugada de los Jets para conseguir su primera victoria
Al fin, después de ocho semanas de competición, todos los equipos en la NFL han conocido la victoria esta temporada. El último equipo que faltaba por hacerlo eran los New York Jets de Aaron Glenn, y lo lograron con una épica remontada este domingo frente a los Cincinnati Bengals. El partido para los Jets fue sufrido, no fue una victoria brillante como en el caso de Miami y Houston, pero el alivio de haberse quitado ese cero del récord de victorias, es sin duda la mayor emoción de la semana.
Además, lograron la victoria con una remontada y, sobre todo, un último touchdown espectacular. Los Jets perdían por 16-31 en el último cuarto pero, con los 23 puntos que anotaron en esos últimos 15 minutos, lograron darle la vuelta al marcador para terminar venciendo por 39-38. Breece Hall fue la estrella del partido, corriendo para 133 yardas y dos touchdowns. Pero por lo que entra en los héroes de la semana es por haber dado el pase del touchdown definitivo para ganar el partido, en una increíble jugada de engaño.
Justo al entrar en los dos últimos minutos, los Jets perdían de seis puntos y se encontraban en un primera y goal desde la yarda cuatro. Entonces, la banda de los neoyorquinos sacó su mejor arsenal. Justin Fields le entregó el balón a Breece Hall, en lo que parecía una evidente jugada de carrera. Sin embargo, el corredor lanzó un pase a Mason Taylor, el tight end novato del equipo, el cual atrapó el balón para sellar la remontada y darle la primera victoria de la era Aaron Glenn a los New York Jets.
Los villanos de la semana
La situación entre Myles Garrett y los Cleveland Browns
Pese a que hemos tenido algunas buenas señales de los Cleveland Browns durante la temporada, en su derrota esta semana se ha visto la historia que se ha convertido en rutina: derrota de unos malos Browns con un buenísimo Myles Garrett. La estrella de Cleveland logró la brutalidad de cinco sacks en el partido frente a los Patriots. Una cifra histórica que no libró a su equipo de la paliza por 32-13.
Entonces, la pregunta es: ¿por qué entra Myles Garrett en los villanos de la semana? La respuesta es sencilla, porque esta situación es completamente decisión suya, por anteponer el dinero al éxito deportivo. Una decisión totalmente respetable, pero claro, si decides quedarte en un mal equipo por los billetes que te dan, no protestes en la banda cuando tengáis malos resultados.
Myles Garrett pidió el traspaso de Cleveland el pasado febrero, debido al nulo proyecto deportivo que tenían los Browns. Sin embargo, en cuanto la franquicia le puso sobre la mesa el contrato de 160 millones de dólares en cuatro temporadas, lo firmó sin dudarlo. Sin que le propusieran nada bueno deportivamente. Por tanto, si tomas la decisión de anteponer lo financiero a lo deportivo, aún siendo más que respetable, no puedes decir nada cuando los resultados sean negativos, tal y como se esperaba.
La ilusión truncada en Nueva York con la lesión de Cam Skattebo
Los New York Giants sufrieron una dura derrota (38-20) en Philadelphia, frente a sus rivales divisionales. Pero la derrota no fue lo peor que se llevaron del partido. Uno de sus dos rookies estrella de este año, el corredor Cam Skattebo, sufrió una gravísima lesión en el tobillo durante el segundo cuarto que le dejará fuera de los terrenos de juego durante toda la temporada. El novato tuvo que ser retirado del campo donde fue ovacionado hasta por la mayor afición rival de su equipo.
Jaxson Dart y Cam Skattebo habían revitalizado las esperanzas en la franquicia de la gran manzana. Tras muchas malas temporadas, por fin habían encontrado a un dúo de quarterback y corredor con un potencial tremendo. Por desgracia, no volveremos a ver a Skattebo este año. Dart deberá continuar su temporada sin su mejor socio. Pese a la dura lesión, los neoyorquinos deberán confiar en la plena recuperación de su corredor para la próxima campaña y afrontar lo que queda de esta como una oportunidad para que su equipo plagado de jóvenes promesas siga evolucionando.
El declive de Spencer Rattler
Otro jugador al que puede que dejemos de ver también es Spencer Rattler. Por suerte, no por ninguna lesión, si no por decisión de su entrenador. Rattler llevaba varias jornadas jugando a un buen nivel, sosteniendo a unos New Orleans Saints con muy poco talento. Sin embargo, durante la derrota de esta semana frente a los Tampa Bay Buccaneers, Kellen Moore decidió cambiar los mandos de su ofensiva. Sentó a Rattler en el banquillo durante el tercer cuarto para darle la oportunidad al rookie seleccionado en la segunda ronda, Tyler Shough.
La sustitución de Rattler pudo pillar por sorpresa a muchos, ya que venía de completar buenos partidos durante las últimas semanas. Sin embargo, este domingo no le salió nada. Perdió dos balones, uno vía intercepción y otro por un fumble y no era capaz de hacer avanzar a su ataque. Por eso, el entrenador jefe de los Saints, Kellen Moore, decidió sentarlo en el banquillo en el tercer cuarto, para darle la oportunidad al quarterback que sí ha seleccionado él mismo, en el puesto 40 del pasado draft. El novato tampoco tuvo unos primeros snaps brillantes en la NFL, pero lo lógico sería pensar que, una vez tomada esta decisión, no se volverá atrás con ella. Por lo que probablemente veamos a Tyler Shough a los mandos de los New Orleans Saints, al menos durante las próximas semanas.