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Los aficionados de esta franquicia, hemos estado escuchando como muchos haters dicen al final de cada temporada: «Miami ha ganado su Superbowl«. Consiguiendo ganar a los Patriots nuevamente en diciembre, pero en esta ocasión, complicándoles la vida para afrontar el ansiado playoff.
Otro ejemplo, fue la temporada pasada. Los Dolphins se llevaban en casa una importante victoria con el reloj ya marcando cero, con la denominada «Miami Miracle«. Fue considerada la mejor jugada de toda la mencionada temporada. Eso si, no volviendo a ganar ningún partido en lo que restaba de ella.
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Nadie daba un duro por la franquicia aquamarina, y tuvimos que escuchar frases como: «vergonzoso lo que están haciendo estos Dolphins», o incluso , «la NFL debería sancionar esta actitud» a lo largo de esta campaña número 100 de la NFL. Aún así, con un roster falto de talento y con muchos dando un récord de 0-16, creyendo que se buscaría el pick-1 de este próximo draft, Miami consigue llevarse cinco victorias pudiendo haberse llevado alguna más (fallando la conversión contra Redskins):
En Mundo Dolphins, hicimos un pronóstico al inicio de esta temporada y la media fue de siete victorias. Se tenía una idea de lo que nos podíamos encontrar.
Después de llegar con tan solo cuatro victorias en su casillero, y con unos Patriots que se jugaban mucho en este encuentro para obtener el esperado Bye. Los aficionados de la NFL esperaban una aplastante victoria de los locales y llenaron la grada para disfrutarlo, pero se encontraron una situación muy distinta. Unos Dolphins que llevaban toda la década sin ganar en Boston, y en la era Brady solo han conseguido la victoria en dos ocasiones (Brady no jugó en ninguno de ellos). Algo más que un duelo divisional, contra un equipo que en la ida les encajo 43-0 en su propia casa..
El equipo de Brian Flores salió al terreno de juego con ganas de luchar, y llegaron a ponerse 10-0 en el marcador. Los Patriots consiguieron el empate, justo antes de irse al descanso. Pero un Ryan Fitzpatrick que hizo 99 yardas de pase más que el mismísimo Tom Brady, un Devante Parker que fue como un dolor de muelas para Gilmore, consiguiendo acabar la temporada con más de 1200 yardas, siendo así el quinto receptor con más yardas de la temporada regular.
Esta victoria sirvió como continuación del partido contra Bills, mostrando que los Patriots tenían problemas evidentes, y si no conseguían el Bye, podría ser un jarro de agua fría. Y así fue, el tercer partido consecutivo en casa y recibiendo a Titans para jugarse la ronda de comodines. Tennessee con un ex delfín al volante, consigue dejar fuera a los de Boston, teniendo una oportunidad de volver a Miami para jugar la Superbowl.
Chiefs consiguen el Bye
Al finalizar el encuentro de Boston, con los Chiefs ganando a Chargers y todavía en el terreno de juego, anuncian en la pantalla del Arrowhead Stadium que Dolphins se llevaban la victoria. La grada y jugadores estallaron de alegría, sabiendo que no jugar la ronda de comodines, les iba a beneficiar. Más tarde, en la rueda de prensa, el entrenador jefe de Kansas daba las gracias con un «Hail to the Dolphins». Se enfrentarán contra Houston Texans después de esta semana de descanso. Mientras que los Miami Dolphins y los New England Patriots ya piensan en la siguiente temporada.
Temporada baja
Esta victoria mostró una visión distinta a los aficionados del sur de Florida. Resulta que un Quarterback que llegaba de forma provisional para tapar el vacío que dejaba Tannehill, ahora se ha convertido en un jugador de confianza para una temporada más. Se presentan muchos meses de espera, pero muy interesantes. Con catorce selecciones en el Draft y cien millones aproximadamente de espacio salarial, se pueden hacer muchas cosas en la agencia libre. La pregunta es: Si seleccionan al esperado Tua, ¿que pasará en el puesto de Quarterback? Iremos hablando de ello conforme vaya surgiendo los acontecimientos. Pero, una cosa esta clara, ahora «Fitzmagic» es un jugador que gusta.